Los niños menores de 2 años no deberían ni ver televisión ni exponerse a las pantallas digitales y los de entre 2 y 5 años hacerlo menos de una hora al día. Tales son las principales conclusiones de un reciente estudio realizado por la Asociación Canadiense de Pediatría que acaba de publicarse con el título Tiempo de pantalla y niños pequeños: promoción de la salud y desarrollo en un mundo digital. Y eso incluye el uso de teléfonos móviles y tablets. Puede afectar muy negativamente a su desarrollo y no solo por estar sometidos a las radiaciones electromagnéticas que reciben, sino cuanto mayor es el tiempo de exposición.
El trabajo canadiense de cohorte longitudinal sobre nacidos en 1997 y 1998 señala que hay una clara asociación entre la excesiva exposición a la televisión a los 2 años y la victimización, el aislamiento social, la agresión proactiva y las conductas antisociales en la infancia a los 13 años. “Los adolescentes con dificultades para relacionarse –señala el estudio- corren el riesgo de tener a la larga problemas de salud -como depresión y enfermedades cardiometabólicas- y problemas socioeconómicos por bajo rendimiento o desempleo.”