La World Teacher Trust (Confianza en el Maestro del Mundo) es una organización internacional de personas que se sienten inspiradas por las vidas y enseñanzas de los Grandes Maestros de la Sabiduría Eterna. Desde esa mirada, compartimos una reflexión en torno al alma o nuestro ángel solar, y sus cualidades. Además de adentrarse en los conocimientos aquí expresados, la invitación siempre es a aplicarlo en nuestra vida diaria, para que se transforme en sabiduría.
La conciencia pura sale desde el fondo de la existencia. De su esencia, esta conciencia cósmica hace que nazca el proceso de creación y en el impulso a manifestarse, se pormenoriza en la trinidad, voluntad cósmica, amor cósmico e inteligencia cósmica. Voluntad, amor y actividad inteligente son las cualidades naturales inmanentes del alma universal, y nuestra alma también lleva estas tres cualidades divinas dentro de sí misma. La trinidad de cualidades cósmicas es anterior a la voluntad, al amor y a la luz que conocemos e incluso anterior a la vida que conocemos.
Aquí, el amor es otro nombre para el conocimiento puro que se llama Jnana en sánscrito. De la palabra Jnana viene la palabra griega Gnosis, y también la palabra en inglés knowledge (conocimiento). Las escrituras de Oriente sólo hablan de conocimiento y entienden el amor como parte del conocimiento. Cuando estamos completamente en el conocimiento, estamos en el amor, que nos permite incluir todo y negar nada.
El amor puro, el puro conocimiento, une, mientras no vivamos este amor, dividimos, excluimos y sufrimos la debilidad resultante.
Voluntad divina, puro conocimiento y actividad inteligente… estas tres cualidades irradian naturalmente desde el alma. Como individuo YO SOY, nuestra alma es una conciencia localizada que expresa al alma universal dentro de nosotros. Sus tres cualidades son intrínsecamente impersonales, son un suceso que se manifiesta a través de nosotros y no un hacer de nosotros, por tanto, el amor puro es amor impersonal. Fluye a través de nosotros como una expresión de la corriente de sabiduría y amor divinos, y no es un acto de amor. Este amor no elige si quiere fluir aquí o allí, no tiene gustos ni disgustos. En este sentido, no vivimos una vida según nuestros gustos, sino que nos relaciona con las cosas que nos llegan. Quien venga a nosotros y se relacione con nosotros, nos relacionamos con ellos en consecuencia.
El amor no tiene preferencias, es neutral y nos impregna desde el corazón. El amor de un Maestro de la Sabiduría es amor puro, se activa por voluntad y se expresa a través de acciones hábiles, inteligentes.
El Ángel Solar
Nuestra alma también se llama el Ángel Solar. En el tiempo en que los seres humanos se individualizaron, los Ángeles Solares descendieron por compasión para grabar algo de su esencia en las capas mentales del hombre animal. Era una parte del gran plan para grabar este germen en el alma humana con el fin de hacer al ser humano consciente de sí mismo, así, un poco de la luz espiritual ha entrado en las células del cerebro humano. Las otras dos cualidades, el amor espiritual y la vida espiritual, fueron retenidos por los Ángeles Solares. Ahora, estas cualidades se externalizarán. Desde el punto de vista de la Jerarquía, el tiempo apremia, por tanto, la Jerarquía se manifiesta en una variedad de maneras para informar a las personas y permitirles concentrarse en la Luz y así en el Amor y la Vida de la Naturaleza espiritual.
La energía eléctrica de la Era de Acuario trae un florecimiento de la mente y causa una crisis que nos permite pasar de la conciencia YO SOY a la conciencia de ESO SOY YO. Si estamos dispuestos a asimilar la energía eléctrica, la disfrutaremos, de lo contrario, seremos quemados por ella. Depende de nosotros si lidiamos comúnmente con trivialidades o nos alinearnos más y más al alma y nos unimos a su ritmo.
La Tríada Espiritual
Nuestra personalidad también funciona sobre la base de la tríada espiritual. En realidad, las tres cualidades del alma son sólo una manifestación que dividimos en tres para nuestro entendimiento: la luz es amor y voluntad; el amor es voluntad y luz; la voluntad es amor y luz. Esta unidad no puede ser entendida por la persona ordinaria. Pero cuando estamos en la síntesis, los tres fluirán a través de nosotros. Cuando nos ofrecemos a nosotros mismos, pueden fluir a través de nosotros.
En la Gran Invocación, nos dirigimos a la Trinidad como la fuente de luz, amor y voluntad. También podemos visualizar el triángulo en nuestra frente, formado por el ojo derecho, el izquierdo, y el tercero. El tercer ojo representa la voluntad, el ojo derecho, el amor/sabiduría, y el ojo izquierdo, la actividad inteligente. Entonces podemos conectar el tercer ojo personal con el tercer ojo superior que está por debajo de la línea del cabello y que se llama el ojo de Shiva. Es la voluntad de Dios en nosotros. También podemos vincular el ojo izquierdo y el derecho con el ojo de Shiva que está conectado con Shamballa. Así que tenemos un triángulo más pequeño dentro de un triángulo más grande.
La Trinidad de nuestra alma es una micro-manifestación de la Trinidad del alma universal. El centro de la súper alma está en nuestra cabeza, el centro del alma está entre las cejas, y el centro para la distribución de la luz y el amor es el corazón. Estos son los tres centros más importantes en relación con el ser humano.
“Las tres cualidades del alma son sólo una manifestación que dividimos en tres para nuestro entendimiento: la luz es amor y voluntad; el amor es voluntad y luz; la voluntad es amor y luz”.
Reflexión del Alma
Como vivimos en la personalidad, el Ángel Solar está durmiendo en nosotros. En el hombre terrenal, el alma se encuentra en un profundo sueño, y las tres cualidades del alma se reflejan en la personalidad sólo de una manera distorsionada. Las distorsiones ocurren en los planos de pensamientos, de los sentidos, del lenguaje y de la acción.
Vivimos en un mundo material denso, donde el yo inferior es generalmente dirigido a las necesidades del cuerpo y la conciencia más sutil no pasa a través de él. La voluntad impersonal aparece así como deseo, el amor impersonal aparece como amor personal, emocional, y la actividad inteligente impersonal aparece como actividad egoísta que es gobernada por la mente y dirigida hacia interés egoísta. El intelecto individual tiene motivos personales: sabe cómo conseguir algo para sí mismo.
Al amor personal le gustaría mantenerse poseyendo, está lleno de expectativas y se basa en la reciprocidad: te amo cuando me amas, pero si no me amas, no te quiero tampoco. La posesividad es también un amor distorsionado. El amor emocional se dirige a menudo hacia la belleza externa, no es estable, y nuestro gusto cambia constantemente. Por esta razón muchas personas se casan varias veces en la vida. El enamoramiento desaparece fácilmente una y otra vez. Y si el amor no se recibe, el orgullo queda herido y el amor se transforma en rechazo y odio. Así, las cualidades divinas del alma pierden su resplandor y son cada vez más reducidas. El proceso de la práctica espiritual es recuperar el estado original de la voluntad, del amor y de la actividad inteligente.
Cuando trabajamos para realinearnos con el alma, nuestra vida entra en armonía con la vibración del alma. El alma se ilumina, sana, y también puede guiar, las tres cualidades inferiores son nuevamente invertidas y reemplazadas de manera correcta por las tres cualidades superiores. Cada día, el pequeño triángulo debería fusionarse por un rato en el triángulo mayor, como si estuviéramos inmersos en la conciencia oceánica y volviéramos a la voluntad, el amor y la luz de Dios. A través de la luz nos volvemos más transparentes, el intelecto se vuelve más suave y puede ocurrir la intuición.
A través de actos para el bienestar de los demás y no por interés propio, volvemos al estado original de la voluntad divina. Y la amistad irradia amor magnético. El amor es la habilidad de ver las necesidades de los demás, los trata con cordialidad y así, a los otros le gustará cooperar con nosotros. De esta manera, el alma reflejada en la materia recupera su acuerdo con el alma original.
La clave está en identificarse con el plano del alma. De esta forma podemos comprender a la conciencia una que es la fuerza unificadora en la creación. Esto no significa que no reconocemos las diferencias, pero sobre todo vemos lo que personas con diferentes puntos de vista tienen en común. Así, como grupo, podemos fusionarnos en la conciencia una.
Fuentes:
Las Cualidades de alma: The World Teacher Trust
Frases destacadas:
“El amor puro, el puro conocimiento, une, mientras no vivamos este amor, dividimos, excluimos y sufrimos la debilidad resultante”.
“En el tiempo en que los seres humanos se individualizaron, los Ángeles Solares descendieron por compasión para grabar algo de su esencia en las capas mentales del hombre animal.”
“Depende de nosotros si lidiamos comúnmente con trivialidades o nos alinearnos más y más al alma y nos unimos a su ritmo”.
“Las tres cualidades del alma son sólo una manifestación que dividimos en tres para nuestro entendimiento: la luz es amor y voluntad; el amor es voluntad y luz; la voluntad es amor y luz”.
“Cuando trabajamos para realinearnos con el alma, nuestra vida entra en armonía con la vibración del alma. El alma se ilumina, sana, y también puede guiar”