El enorme aumento de casos de cáncer a la tiroides en el mundo es irreal y se debe al sobrediagnóstico de los últimos 20 años, es decir diagnósticos de cáncer en tumores que muy improbablemente fueran a causar síntomas o la muerte durante la vida de las personas.
Lo ha denunciado la propia Agencia Internacional para la Investigación del Cáncer (IARC, por sus siglas en inglés) en un trabajo publicado en The New England Journal of Medicine coordinado por el doctor Salvatore Vaccarella según el cual en tan solo 12 países –Estados Unidos, Francia, Italia, Inglaterra, Escocia, Suecia, Noruega, Finlandia, Dinamarca, Japón, Corea y Australia- se diagnosticó erróneamente de cáncer –no lo tenían- a unas 470.000 mujeres y 90.000 hombres. Un sobrediagnóstico que se estima entre el 50% y el 90%, dependiendo de cada país.
En la mayoría de los casos de cáncer a la tiroides sobrediagnosticados se procedió a la extirpación completa de la tiroides, operación a la que normalmente le siguieron tratamientos dañinos de radioterapia, sin ninguna prueba de beneficio de mejora en la sobrevida de las personas, señalo la doctora Silvia Franeschi, coautora del artículo mencionado.