Lo ha anunciado su ministro de Medio Ambiente, Nicolas Hulot, y será a partir del 2040, fecha a partir de la cual estará prohibida la venta de todos los vehículos a bencina y diésel. También se prohibirá cualquier “nuevo proyecto que utilice bencina, gas o carbón”, así como el gas derivado del fracking.
A partir del 2040, en Francia solo se podrán comprar vehículos eléctricos e híbridos, iniciativa que coloca a Francia como líder al respecto en Europa. Por su parte, Volvo ha anunciado que solo fabricará vehículos eléctricos e híbridos a partir de 2019: «Cada Volvo que lance Volvo Cars a partir de 2019 tendrá un motor eléctrico, marcando el histórico final de los automóviles que solo tienen un motor de combustión interna (ICE) y colocando la electrificación en el centro de su futuro negocio».